Un ChatGPT con moraleja

Una app con inteligencia artificial busca meter moralejas en cuentos infantiles

Que miles de niños se vayan a dormir cada noche escuchando un cuento infantil que ha generado una AI puede parecer una gran idea o un buen comienzo de un capítulo de Black Mirror. He hablado con quienes piensan una cosa y la otra, porque sí, ya hay un ChatGPT para esto. La app se llama Tiny Storie y genera un texto corto, con posibilidad de que una voz lo lea en audio. Cada cuento infantil le cuesta 0,50 euros en llamadas a la API a la empresa. Piensan que puede ser una buena herramienta de «concienciación y recaudación de fondos para asociaciones».

Lo más controvertido es que pide una moraleja, algo que los especialistas dicen que está «archisuperado». «Buscar un cierre moral para una historia infantil nos retrotrae a una idea de la infancia antigua y un literatura caduca. Uno de los principios del arte es el goce y la gratuidad», dice Raquel López Royo, una especialista en literatura infantil y juvenil con más de 30 años de experiencia.

Tiny Storie utiliza la API de OpenAI para texto y para la imagen, creada con Dall-E. También está conectada con los servicios de Google para autenticación de usuarios y creación de las voces. Son tres llamadas a la API por cuento, que cuesta 0,05€ a su creador. Todo es parte de un reportaje que he escrito para Newtral: ‘Una app con inteligencia artificial busca meter moralejas en cuentos infantiles‘, y que he ilustrado usando Midjourney, con la imagen que acompaña este post.

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Literatura en tweets

En Twitter nos agarra una irresistible tendencia a creernos agencia de prensa, y creo que debe ser la misma que nos lleva a que en cualquier congreso el tema «Twitter y periodismo» ocupe el 90% del debate, aunque hayamos ido allí a hablar del futuro.

Pero a 140 caracteres por vez caben tantas cosas, que también se cuela la literatura, sin que ningún poeta haya ido a pedir códigos deontológicos para Twitter. Miren si no:

Aburridos, dios y diablo intercambiaron papeles y lo rehicieron todo una vez más. Afuera de las iglesias, aún se oyen sus risas

(letrascanibales)

-Gosta de ser prostituta? «Gosto.» -Não se sente suja? Usada? «Nem um pouco»-Nunca se sentiu assim? «Uma vez, mas fiz por amor»

[-¿Le gusta ser prostituta? «Sí» -¿No se siente sucia? ¿Usada? «Ni un poco» -¿Nunca se sintió así? «Una vez, pero fue por amor»]

(nathnissi)

«Camina, sólo hacia adelante, camina», en noche de cerrazón, no hay capitán, ni carta, ni cruz del sur, ni en tierra una señal

(kimilsun)

Una pirámide. Plumas de quetzal, sol esplendente. Participé del juego de pelota y desperté al ver mi cabeza pasar por el aro.

(alan1000s)

Andava distraído no meio da multidão. Foi atropelado pela solidão.
[Andaba distraído en el medio de la multitud. Fue atropellado por la soledad]

(marcelobicarato)

Voy a buscar respuestas. Vuelvo y me pregunto: ¿A qué fui?

(mangelicau)

Me despiertas?-dijo ella. Y él tomó su mano, mientras el charco de sangre los rodeaba

(elmundodepax)

Un verano imprudente, un lunes de mierda y un mail desconsolado, ardido con tu firma. Volvé

(leogudino)

Un señor de bata blanca me pegó y lloré sin entender, hasta que la mujer que miraba desde la cama me abrazó. Lloraba, también.

(nourier12)

Muñeco: Con cuidado abre la puerta. Antes de acostarse pinta sus mejillas de rojo. Voltea a la cama y el ventrílocuo duerme.

(altanoche)

Estos fueron algunos de los tuits que se pudieron leer en Twitteratura, el concurso organizado por Hipermedula.org, para el cual me invitaron a participar como jurado.

Se seleccionaron 100 tuits, y el ganador fue Andrés Carvajal (muchotropico) con:

Esta es la breve historia de un tweet que bajó y bajó por la pantalla hasta que desapareció.