La confianza es un puente sin terminar en Kiev

El puente de la foto está sobre el río Dnieper, en Kiev. Empezó a construirse en 1993 y 25 años después sigue sin terminarse. Muchos lo ven como un símbolo de la corrupción política de Ucrania. En este país, justo después de su revolución en 2014, sociedad civil y empresas se unieron para desarrollar un sistema de transparencia en torno al dinero que gasta el gobierno en contratos y compras. 

Si el dinero que gasta nuestro gobierno en contrataciones públicas es de todos, todas las cuentas deberían ser transparentes para los ciudadanos. Deberíamos saber exactamente no sólo quién ganó una licitación, también qué empresas se presentaron, qué oferta se eligió finalmente y cuánto hemos ahorrado. Exactamente esto ha logrado hacer Ucrania, un país que tiene uno de los índices más altos de percepción de corrupción por parte de sus ciudadanos. Lo cuento aquí:  Cómo Ucrania logró poner en marcha su sistema de transparencia en contratos públicos.

 

Wikileaks

Wikileaks

Con Wikileaks y el caso de los documentos filtrados de la guerra de Afganistán estamos viviendo un momento transformador, no sólo en la historia del periodismo moderno, sino también en el debate sobre privacidad y transparencia, seguridad y control, en ámbitos empresariales, políticos y hasta círculos de la Casa Blanca y el Pentágono. Hasta ahora las filtraciones eran algo conocido que de vez en cuando ocasionaba debates internos en las redacciones, pero Julian Assange a bordo de su nave Wikileaks con la transparencia como bandera, ha quitado a los medios de en medio (nunca mejor dicho) y ha exclamado: aquí estamos para mostrar lo que tenga que ser revelado.

Esto es parte de un post mío que sale hoy publicado en ALT1040, lean el resto y si están o no de acuerdo, me encantará escuchar sus puntos de vista, allí o aquí.