Ellos no te lo dirán

En vez de pagar por poner tu compañía en Twitter, pagar porque la mencionen en Twitter y pagar por posts patrocinados, mejor olvídate de todo eso y ponte a hacer cosas realmente buenas que emocionen a las personas. Forma un excelente equipo y cuando el resultado sea tan bueno que tus amigos se lo recomienden a sus amigos, no vas a necesitar ningún tipo de social media marketing.

Matt Haughey (BloggerMetafilter)

Vía ALT1040

Entrevista: Se acabó el control absoluto

Gregorio Verdugo publica una entrevista que me ha encantado contestar, sobre todo porque son temas sobre los que pienso bastante aunque no publico mucho.

Cuando estaba en la universidad discutíamos todo el rato sobre lo que tiene y no tiene que ser un periodista, y ahora veo que esas mismas discusiones se extienden en la red, implicando a muchas personas que manejan información. Me parece muy bueno que unos y otros volvamos a revisitar nuestras conclusiones de entonces, que podamos ampliarlas, recuestionarlas y analizar los nuevos esquemas informativos y comunicativos de nuestra sociedad.

Aclaración: fotógrafa sólo amateur, y las apreciaciones sobre mí del primer párrafo son exclusiva responsabilidad del editor de ese blog.

Transcribo aquí la entrevista:

¿Qué fue de la función de servicio público del periodismo?

Ha ido perdiéndose, evidentemente, de la mano del desprestigio de la profesión en general. Las causas son varias pero pasan por la primacía de lo económico frente al rol que siempre tuvieron los medios como portadores de noticias de interés público.

Sin embargo, la función de servicio público sigue existiendo, sólo que ha quedado relegada a lo individual. No creo que nadie estudie periodismo en estos años por ganar bien, porque es una profesión que está muy mal pagada, en nuestros países hispanoparlantes por lo menos.

Estoy hablando de esa pasión por contar la verdad que lleva a tantos estudiantes a seguir esta carrera y a muchos que no la siguen pero que de igual forma publican contenidos con el mismo entusiasmo. Es lo que nos hace seguir siendo periodistas, y no publicistas, por ejemplo. Es tener ese dato que servirá a mucha o poca gente, y saber que vas a publicarlo, no porque alguien te pague por eso, sino porque sientes cierto deber en hacerlo.

Luego en el mundo laboral de los medios eso choca de frente con muchos obstáculos, algunos pese a ello siguen intentando poner calidad en lo que hacen y otros simplemente se amoldan, se resignan.

La función de servicio público sin embargo se sigue cumpliendo porque está en las manos de muchas personas, a nivel individual más que colectivo, poder publicar y tener voz, algo que antes era sólo un privilegio de las empresas periodísticas. Al decir servicio público también estamos dando por sentado que nos tienen que servir la información, masticada y procesada, que hay alguien responsable de proveernos esa información: no estoy tan segura de que eso tenga que ser así. El lector cada vez es más activo y es o debería ser tarea suya saber a quién lee, y qué intereses hay detrás de cada publicación.

¿Es el llamado periodismo ciudadano un bulo para ahorrar costes?

Aunque creo que el nombre de periodismo ciudadano es erróneo, no es un bulo. El «llamado periodismo ciudadano» es un fenómeno real, pero no es otra cosa que parte del contenido generado por usuarios, que de forma masiva, espontánea y sin fines de lucro, se lanzan a publicar video, fotos, texto en Internet.

Efectivamente, han sido muchos los intentos de los medios para utilizar estos recursos como forma de conseguir material informativo a poco o nulo coste, pero no han llegado a formar un esquema sólido de cara al futuro. Una cosa es que un periodista esté alerta a lo que está siendo generado por usuarios y pueda utilizarlo como parte de sus fuentes, y otra cosa diferente es que un medio pretenda suplir a los profesionales con este tipo de contenidos; eso definitivamente no ha funcionado. Cada vez más se necesitan productos informativos de calidad, especialización en los temas y para eso hace falta no sólo talento sino formación, constancia y compromiso con el medio.

¿Supone el periodismo ciudadano el mayor peligro de intrusismo laboral para los periodistas?

No. Pero si un periodista está produciendo contenidos que puede generar cualquier amateur con una cámara entonces sí. El periodista tiene talento, formación y criterios para enriquecer esa información primaria, para investigar más allá y producir una pieza informativa superior.

Sin embargo, muchas veces la situación de devaluación profesional se da porque desde la dirección del medio la exigencia no es de calidad sino de recortar costes, y eso influye negativamente en el producto final, que termina siendo similar al de un amateur entusiasta.

¿Cree necesaria una regulación, fuera de lo que marca la propia ética de la profesión?

En mi carrera he visto demasiados códigos de ética, regulaciones y listas de buenos propósitos. Creo que las regulaciones en la práctica suelen no ser más que palabras, y que el compromiso tiene que darse desde cada profesional, comprometido con su audiencia y bajo la mirada de sus pares.

¿Concibe los medios en manos de los ciudadanos?

Los medios ya están en manos de los ciudadanos, aunque muchos no lo vean, quieran o puedan verlo. Es el principal cambio que se ha producido y que está revolucionando el esquema comunicativo social.

¿Cuál cree que serán las características del medio del futuro?

No lo sé. Creo que no es posible hacer predicciones metidos como estamos en plena etapa de cambios. Los medios se están redefiniendo, algunos buscan una salida derivando sus contenidos hacia la web, otros buscan vender suscripciones. Lo que está claro es que sólo con una mayor honestidad y acercamiento a los lectores podrán subsistir los medios. Se acabó el esquema de autoridad y control absoluto de la información que se publica.

¿Son la colaboración y la complementariedad las claves de las noticias del futuro?

Si entendemos colaboración como apertura del periodista, como una permanente actitud de escucha hacia el resto de la sociedad, sí. Si hablamos de complementariedad en cuanto al cómo, a la técnica, creo que todo lo que pueda hacer que la información sea más clara tiene que usarse.

¿La noticia, como hoy la conocemos, tiene futuro?

La noticia siempre tendrá futuro porque necesitamos saber qué pasa en nuestro entorno. Pero no seguirá existiendo con los mismos formatos. El hipertexto en Internet introdujo unos nuevos códigos de presentación de la noticia, por ejemplo. Los enlaces amplían nuestro conocimiento y nuestras referencias: las noticias están cambiando a través de todas estas nuevas formas de presentarlas.

¿Se puede afirmar, como hacen algunos, que la información es ahora de todos?

Si. Lo es. Antes los medios decidían qué se publicaba y qué no, y lo que no se publicaba nunca salía a la luz. Hoy los medios de publicación están al alcance de cualquiera con ordenador e Internet, cada vez más, y eso significa que hay más espacios para publicar de todo: lo importante, lo superfluo, lo cotidiano, lo específico.

¿Qué es lo que nunca le enseñaron en la facultad de comunicación y debieron haberlo hecho?

No me enseñaron la mayoría de las herramientas que uso ahora para hacer periodismo, pero no podrían haberlo hecho, por que no existían. No me enseñaron nada de lo que creo que es fundamental para esta profesión: tenacidad, curiosidad y pasión en la búsqueda de la verdad, porque simplemente creo que eso no se podría enseñar, lo traes o no. Pero sí me enseñaron a mantener una actitud crítica ante todo lo que me cuentan, leo, escucho, a preguntarme muchas cosas y a entender que no es malo tener más preguntas que respuestas.

Primeras damas en el asiento de atrás

Academics, economists, lawyers, businesswomen: the qualifications in the room made for a highbrow coffee morning. It was disappointing not to find a few more husbands of presidents and prime ministers in the mix, but clearly miracles don’t occur over mere decades in politics.

The spouses included grandmothers and mothers, career women and career wives – all engaging with the complicated challenges of taking a back seat while in most cases being qualified to ride upfront.

Maybe one of these days we’ll see women like these at the summit, and a few more boys at the sideshow.

Michelle Obama, Karl Marx and the secrets of the G20 First Wives’ club, The Guardian.

How to Make a Peanut Butter Sandwich, by the Losties

Jack
1. Gather ingredients
2. Point gun at ingredients and shout “HOW DO I MAKE A SANDWICH OUT OF YOU?!?!?”
3. Breathe heavily through your nose as though you were about to hit ingredients
4. Give up and make the sandwich yourself, and eat it bitterly

Kate
1. Make separate sandwiches, one with peanut butter and one with jelly
2. Take a bite of the peanut butter sandwich, declaring it the best
3. Take a bite of the jelly sandwich, declaring it the best
4. Repeat steps 2 and 3 ad infinitum
5. Follow peanut butter or jelly sandwich into grave danger

Sawyer
1. Throw the jar of jelly at wall, sneering “I don’t need no sandwich”
2. Call the mascot on the jar of peanut butter lots of clever nicknames
3. Huff and puff and stomp around and grumble a lot
4. When no one’s looking, make perfect, even, symmetrical peanut butter and jelly sandwich and sit in a corner, enjoying every bite

Locke
1. Sit idly by, believing that the ingredients will find a way to make a sandwich out of themselves
2. Lose faith and make the sandwich anyway
3. Realize that you were the instrument by which the ingredients chose to make a sandwich after all
4. Run around the room and grab everyone’s knives, insisting that their sandwiches will do the same in time

Hurley
1. Make sandwich
2. Eat sandwich
3. Repeat steps 1 and 2 ad infinitum

Sayid
1. Procure 23 milligrams of uranium-20
2. Set hadron supercollider to eight megajoules
3. Program a sandwich-making macro using Cobol or Visual Basic
4. Act all tough-like

Desmond
1. Eat sandwich
2. Call the sandwich “brother”
3. Place peanut butter slice over jelly slice
4. Spread jelly on the other slice
5. Spread peanut butter on one slice
6. Take two slices of bread, a jar of peanut butter and a jar of jelly

Ben
1. Steal someone else’s sandwich
2. Claim you coerced them into making the sandwich for you all along
3. Say you’ll tell them everything if they make you another sandwich
4. Stare at them all creepy-like

Libby
1. Lay out plans for one of the most intricate, fascinating, and delicious sandwiches of all time
2. Just as you start making it, get shot

Claire
1. Mmmmmmm, peanut butter

via Fuck Yeah Lost

Jack Dorsey en España: noticias de Twitter

jack-dorsey

Muchas cosas sucediendo como para que no escriba nada: Twitter cumple 3 años y Jack Dorsey anda paseando en estos días por España, invitado por Cibervoluntarios para eSTAS y disfrutando de unos días libres en un país del que ama su cultura, según ha dicho varias veces.

A riesgo de calificar como fanboy fangirl, diré que para mí ha sido maravilloso volver a verle la semana pasada y compartir impresiones sobre todo lo que ha cambiado Twitter nuestras vidas. La primera vez que Jack estuvo en tierras ibéricas estuvimos cenando con los chicos del ex ADN.tv, que tuvieron la amabilidad de invitarme, y que grabaron esta entrevista.

Curiosamente seguimos siendo los mismos, usándolo de la misma manera, conversando igual. Todo lo que hablamos esa vez sigue completamente vigente, a pesar de que muchas cosas han cambiado, entre ellas el crecimiento de Twitter y todo lo que ha generado. Algunos apuntes:

Twitter no es una red social: La gran herramienta que es Twitter está más allá de ser una red social: es una nueva forma de comunicarse, y por eso entiendo (aunque no comparto las razones) que algunos hablen de separar la empresa de la herramienta.

Las olas de nuevos usuarios: Jack ha observado en Estados Unidos el mismo fenómeno que se observa en España ahora: primero entraron a Twitter los geeks, los techies, luego los PRs, y ahora las empresas se han dado cuenta de que tienen que estar ahí de alguna manera. Pero finalmente, según él, «Twitter termina siendo lo que siempre fue: comunicación, conversación» y cada uno encuentra su forma de usarlo, y eso es lo que está pasando ahora en EE.UU., la gente ha podido relajarse un poco con el tema.

Su modelo de negocio pasa por el uso de Twitter por parte de empresas: Jack siempre dijo que el modelo de negocio que exploran no está relacionado con modificar la experiencia de los usuarios particulares, ni por medio de cobrar suscripciones ni por medio de publicidad.

Sobre esto se ha especulado muchísimo, primero sobre los «anuncios internos»: si eso es publicidad interna entonces ¿los blogroll en los blogs califican como publicidad encubierta que hago a mis amigos?

El anuncio de ExecTweets y la promoción por parte de Twitter empresa hicieron creer en un primer momento que estaban anunciando por fin su monetización, pero resultó no ser un proyecto de Twitter sino el uso de su API por parte de Federated Media.

Luego un chiste sobre posibles cuentas premium abrió el debate para que The Business Insider titulara confirmando cuentas pro. Biz Stone aclaró que no había ninguna cuenta pro, que el servicio sigue siendo gratuito para usuarios y empresas, y que sólo estaban estudiando cobrar por ofrecer más funcionalidades a quien lo solicite.

Opciones que no pasan por más caracteres, sino servicios mucho más interesantes que ellos se han cuidado hasta ahora de dar públicamente: estadísticas, tráfico y este tipo de cosas. Por ahora, simplemente lo están estudiando, y la verdad es que tras toda la inversión que han recibido, se los ve muy tranquilos.

Los Suggested Users no pagan por estar allí (aunque ya hay quien se ha ofrecido voluntario): Twitter decidió agregar a ciertos usuarios famosos o destacados como sugerencia para los que abren cuentas nuevas y esto también ha sido muy cuestionado. Fue una iniciativa unilateral de Twitter, y Jack me hizo acordar que esta opción estaba al principio en el Public Timeline (estamos hablando de hace 3 años), también como suggested users aunque en esos momentos no había celebrities.

El equipo de Obama no los ha contactado: A mi pregunta, Jack sonríe y agrega «not yet».

Twittdays: Una de las primeras cosas que me preguntó fue por las fechas de los Twittdays y ver si podíamos cuadrarlas para que pudiera encontrarse con usuarios de las ciudades en las que iba a estar. Ya estuvo charlando con los chicos del Twittsev y ahora estamos intentando coordinar para Madrid, pero el puente de Semana Santa y su agenda complican un poco las cosas. Si hubiera algo avisaremos, pero está complicado.