Hoy el maestro de Takeshi vio cómo subía imparablemente el contador de visitas de su blog, Ruso Mínimo, tras haber sido mencionado en El País.
Algunos dejaron unos mensajes, primer feedback masivo para el maestro de Takeshi. Le he recordado la presión de postear más seguido ahora, y me ha dicho que en cuanto termine de renegar con el linux de mi ordenador, postea la siguiente entrega de sus podcast.
Así que ya sabéis a quién culpar.
Davró pozhalovaitz!