“Ability is what you’re capable of doing. Motivation determines what you do. Attitude determines how well you do it.”
Lou Holtz
(Habilidad es lo que eres capaz de hacer. La motivación determina lo que haces. La actitud determina qué tan bien lo haces.)
Escuelas y carreteras
El título del artículo: Los puentes de Obama hacia ningún sitio
«Quiere gastar cientos de miles de millones en carreteras y escuelas. Mala idea.»
Como bien apunta Caro, seguro que el señor Spitzer tiene algunas sugerencias para gastar el dinero de formas más obscenas.
El viernes, Twittbaires
Los tuiteros de Buenos Aires están por verse las caras en el primer encuentro tuitero, hermano de los que hacemos hace un año en Madrid y algo menos en Sevilla, Barcelona, Tokio, Lisboa, Londres. La expectativa, las ganas de verse, el entusiasmo se repiten, y el hecho de que todo suceda en el país donde nací lo tiñe de un color especial.
Mauro Accurso organiza y yo disfrutaré otra vez de esos momentos de desvirtualización que tanto me gustan. Escribí algo sobre eso para el blog de Twittbaires. Nos vemos ahí el viernes.
Nota: El logo, como los del resto de los twittdays, es de dithern.
1 de enero
via remindyourself
Cambio: la palabra del 2008
El 2008 fue el año del cambio. Para mí y para todos. Y no estamos hablando de un cambio como cuando decimos rediseño, sino como cuando decimos reset.
Es el año en el que los europeos dejamos de pensar en las pateras que llegan y empezamos a pensar en las hipotecas que se quedarán sin pagar. En el que Rusia nos volvió a hacer acordar que hubo una Guerra Fría, y lo bonito que es tener calefacción en los inviernos europeos. Fue un año que pasará a la historia porque los estadounidenses eligieron no ya a un presidente negro, sino alguien además llamado Hussein y Obama.
Fue el año en el que algunas empresas comienzan a darse cuenta de dónde tienen que estar pero no saben cómo hacerlo . En el que los emprendedores se dieron cuenta de que el lujo de no tener un plan de negocio (conocido) quizás sólo se lo puede permitir un fenómeno como Twitter.
El año en el que perdimos la inocencia con Google, el año en el que por primera vez una tribu surge de internet. El año en el que hemos matado a los blogs y a los videoblogs, sólo para darnos cuenta de que están más vivos que nunca unos, y reinventándose los otros. El año en el que Twitter nos hizo creer que moría pero, a pesar de sus fallos, no pudimos matarlo, y su Failwhale hasta tiene un club de fans. En 2008 Chikilicuatre fue a Eurovisión, algo muy profundo tiene que haber cambiado para que eso suceda. Este año todo se volvió social, la política comenzó a aprovechar eso, allí y en mucho menor medida aquí, aunque por lo menos volvimos a tener un debate. El periodismo se ve desafiado, se cuestiona, se redefine y caen los ingresos de unos medios tradicionales que ven cómo sus audiencias van por otro camino.
Fue un año de cambios bastante profundos, y si teníamos alguna duda, terminó de hacer su entrada en el panorama la crisis. Palabra que sirve de triste excusa de malas decisiones empresariales y abandono, pero también una terrible época de turbulencias que limpiará lo que no sirva, desafiará a continuar a los que ya están en marcha, y obligará a repensarlo todo, a imaginar y a innovar.
Camino a Argentina
Hoy me voy a Argentina, en un viaje varias veces postergado. La última vez que estuve allí no había twitter, y yo estaba comenzando mi blog, en inglés y sin saber muy bien por qué. Fue en el 2004.
Desde que soy autónoma y trabajo sin un lugar fijo puedo hacer una de las cosas que más me gustan: viajar. En este viaje estaré en Mar del Plata, Buenos Aires, Córdoba, San Luis, y alguna ciudad más, visitando amigos y familia, y trabajando cada vez que encuentre una conexión. En Argentina no hay forma de comprar una conexión 3G para un portátil de tipo prepago, o sea sin meterse en un contrato por dos años, por lo que me han dicho.
Es la primera vez que me encuentro preocupada por si conseguiré wi-fi más que por saber qué ropa llevar, es la primera vez que llevo más cables que zapatos, y también la primera vez que tuitearé desde el país donde nací.
Voy a desvirtualizar a muchos conocidos online desde hace bastante y eso me llena de expectativas. Además, con varios nos juntaremos en el primer Twittbaires, organizado por Mauro Accurso y Perse. Tengo muchas ganas de charlar con todos y ver qué se está haciendo por allá en internet.
Con la sensación de que en este viaje no echaré mucho de menos a mis amigos porque están bastante conectados, tampoco me despido. Nos vemos, nos escribimos, nos leemos desde la otra orilla.
Por cierto, la foto es de Ernest.
Epistemología aplicada a Twitter (quién lo diría)
Que muchas de las simetrías del mundo real se transladan a Twitter, completamente de acuerdo. De Bruces publica un excelente y muy elaborado análisis matemático sobre este mundo online. Aunque Rodrigo tiene razón en algunas cosas sobre las que he charlado con él, no puedo decir que estoy de acuerdo.
Creo que todo este esfuerzo que ha hecho en demostrar la injusticia social de Twitter a través de la matemática está basado en premisas no medibles y por lo tanto intenta con un método de ciencias duras medir lo social.
Claro, yo soy herméneutica y no positivista y no puedo estar de acuerdo con la reducción que implica intentar medir relaciones sociales en métodos matemáticos… Hay muchas cosas que se pierden en el camino, para el modo de ver de muchos autores, las más importantes.
Por ejemplo, se menciona la riqueza como lo que aporta cada usuario al universo tuitero, riqueza como información basada en su trabajo, estudios o simplemente existir, pero cómo medimos los distintos tipos de usuarios: los que actúan como fuente de contenidos, los que actúan como nodos conectores, los que dinamizan conversaciones… incluso un mismo usuario combina estos diferentes usos según el momento.
En afirmaciones como esta:
(Crecimiento) Asintótico: Cuando el usuario es “normal”, es decir, no presenta ninguna situación especial de valor o fama para el colectivo y sus twits tienen una relevancia equivalente a su personalidad.
y si estamos hablando de un estudio científico, no encuentro la definición de «valor para el colectivo», «relevancia equivalente a su personalidad».
Claro que yo conozco a Rodrigo, supongo lo que Rodrigo quiere decir, pero si nos estamos basando en lo que suponemos y no en definiciones explícitas, entonces falta base para el estudio. Es la misma dificultad que encuentran los positivistas cuando pretenden estudiar sujetos sociales desde los métodos de las ciencias duras: para definir todos estos conceptos hay que recurrir a las ciencias sociales.
Es tan rico el universo twitter en simbologías, en relaciones, en significaciones, en códigos… ¿Qué significan ciertos tweets para unos y qué para otros? ¿Cuáles son los mecanismos psicológicos de descarga, de reacción ante cada uno de los tweets, cuáles los sentimientos ocultos que desencadenan, cuáles las suposiciones y los imaginarios sociales e individuales que están en juego…? ¿Cuáles los roles sociales, los personajes que asumimos consciente o subconscientemente en este mundo virtual, cuáles los mensajes que nos comunican?
En algo sí estamos de acuerdo. Diferentes aproximaciones a algo que nos morimos por estudiar porque en el fondo nos apasiona por igual: las relaciones humanas, internet y la mezcla de ello. Lo mejor es que después de esto Rodrigo ya no me podrá decir que la obsesionada con twitter soy yo.