Aprueban enmiendas para controlar internet

magnifying glass

Últimamente el panorama de las medidas de control de la red por parte de políticos europeos no tiene nada que envidiar a cualquier fantasía de Orwell. El lunes se votaron finalmente las enmiendas contra internet de las que hablaba en este post, incluyendo algunas «ocultas» que no se mencionaron originalmente pero fueron promovidas por un grupo de políticos y lobbystas de grupos defensores de las patentes.

Benjamin Henrion, de la FFII, advirtió que «Skype o incluso Firefox podrían ser declarados ilegales en Europa si no son certificados por una autoridad autorizada». Estas medidas ya han sido aprobadas por la comisión y les queda el trámite en el Parlamento Europeo en septiembre.

Quizás sea un buen momento, antes de las elecciones europeas del año que viene, de quitar nuestros ojos de la tablita de precios del iPhone y estar más atentos a las iniciativas que surjan. El equipo de The Pirate Bay ya han empezado a hacer algo con su propuesta de encriptar internet por completo, por medio de una tecnología que oculta todas las comunicaciones salientes de tu ordenador.

Yo hoy no celebro nada

Quizás el lobby de pasteleros tenga algo que festejar el 17 de mayo, yo desde luego no veo ningún acierto en esto que han montado para justificar los presupuestos dedicados al Día de Internet.

Todos vemos esta brecha que existe entre los que tenemos el uso de internet incorporado a nuestra vida, y una mayoría de personas a las que tenemos que explicar a cada rato qué es un blog, o por qué no hay que reenviar correos con todas las direcciones sin ocultar.

Sabemos que la causa de que España todavía esté a la cola en el uso de internet en Europa no se debe realmente a que «a los españoles nos gusta salir y no estar en frente del ordenador» sino a que tenemos las tarifas más caras y el ADSL más lento de la Unión Europea.

La sociedad de la información tiene que ser posible para todos. Más allá de que unos seamos unos apasionados, cualquier persona debería poder enfrentarse a las nuevas tecnologías sin miedos, con la capacidad de poder buscar, discernir, conocer las posibilidades, poner la tecnología a su servicio, tomar sus propias decisiones en cuanto a lo que consume en todo tipo de contenidos: musicales, periodísticos y hasta ideológicos.

Es en estas circunstancias que la administración del estado, al organizar los festejos por el día de internet, presenta una serie de actividades que poco tienen que ver con el acercamiento real de internet a los ciudadanos.

Unos funcionarios que dicen que no son «partidarios de la extensión de las redes WiFi por la ciudad» mientras te invitan a comprar en El Corte Inglés en su nota de prensa no sólo no están promoviendo el uso de internet, sino que probablemente pocas veces se preocupen por saber qué pasa en la red, cómo pueden acercarla a todos, y probablemente no sepan qué es un podcast.

Y ahí también está la brecha digital. Como decía Eduardo en el podcast #3 de Alt1040, la brecha digital no es solamente generacional, también existe entre los políticos y la gente. Internet no será de todos mientras los responsables de adjudicar presupuestos los destinen a pastelitos y no a conexiones y ancho de banda real; mientras los usuarios de ADSL sigan viendo sus derechos sin respetarse.

Que otros se acuerden de internet hoy para olvidarse durante los siguientes 364 días, yo hoy no tengo nada que celebrar.

Más links:

ADSL rural, mucho más caro y mucho más lento – ELPAIS
La sociedad de la información crece en España a un ritmo más lento – ELPAIS
La expansión de la bancha ancha en España esta por debajo de la media europea – HoyInversión

Downgrading para las Escuelas de Idiomas

Todos los alumnos que estudien o hayan estudiado en una Escuela Oficial de Idiomas ven bajar la categoría de sus diplomas.

Tengo actualmente dos de estos diplomas devaluados. Hablo inglés desde pequeña pero dí el examen final en la EOI hace tiempo. También saqué el diploma básico de neerlandés, idioma en el que estoy en cuarto año. Me gusta la EOI por la comunidad de personas que están en ella y porque da la oportunidad a todos de estudiar un amplio espectro de idiomas, en muchos casos con poquísima oferta educativa.

Este año, tanto alumnos como profesores estamos shockeados por algo que se ha decidido desde el Ministerio: los centros públicos tendrán una categoría menor a la de los centros privados.

Estuve hablando con Juanjo, un amigo y compañero de neerlandés y representante de alumnos. Me cuenta que las Escuelas Oficiales de Idiomas, los únicos centros de estudios de idiomas públicos de España, hasta el año pasado daban una enseñanza que preparaba al alumno para tener un uso competente del idioma, lo que era cercano al nivel C del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas.

Con el desarrollo de la Ley Orgánica de Educación (LOE), las administraciones educativas se han perdido la oportunidad de homologar esta situación oficialmente. Al no haberlo hecho, se recorta la posibilidad de llegar al nivel más alto del aprendizaje, que el Consejo de Europa define como el más adecuado para el acceso de estudiantes y profesionales a becas y ofertas profesionales en cualquiera de los países de la Unión Europea.

Entonces, quienes quieran obtener una certificación de los niveles más altos de aprendizaje de un idioma, tendrán que acudir a instituciones privadas o extranjeras. Desde España, ningún centro de enseñanza público podrá certificar los niveles superiores, y tampoco enseñarlos en las aulas: el nuevo plan de estudios para EEOOII publicado por el MEC y desarrollado por la Comunidad de Madrid sólo llega al nivel B2 de los 6 (A1 y A2, B1 y B2, C1 y C2) reconocidos por Europa.

Alumnos y profesores han montado respectivos blogs, y están movilizándose para que las autoridades educativas les escuchen, pero no hay resultados demasiado alentadores por el momento, según lo que me cuentan.

En los discursos políticos el tema del bilingüismo llena muchos espacios, pero luego nadie oye a quienes forman parte de unas escuelas que enseñan no sólo inglés, sino 21 idiomas más, desde cero hasta el nivel más alto de competencia lingüística (hasta ahora, claro).

A billion

The next time you hear a politician use the word «billion» casually, think about whether you want that politician spending your tax money.

A billion is a difficult number to comprehend, but one advertising agency did a good job of putting that figure into perspective in one of its releases:

– A billion seconds ago, it was 1959.

– A billion minutes ago, Jesus was alive.

– A billion hours ago, our ancestors were living in the Stone Age.

– A billion dollars ago was only 8 hours and 20 minutes, at the rate Washington spends it.

(received by emai)

warning

The Center for Disease Control has issued a warning about a new virulent strain of sexually transmitted disease.

This disease is contracted through high risk behavior, although cases have also been reported of individuals or whole families contracting it through prolonged contact with certain news media or social groups. It is called Gonorrhea Lectim (pronounced «gonna re-elect him»).

Many victims have contracted it after having been screwed for the past 4 years, in spite of having taken measures to protect themselves from this especially troublesome disease.

Cognitive sequelae of individuals infected with Gonorrhea Lectim include, but are not limited to:

Antisocial personality disorder traits;

delusions of grandeur with a distinct messianic flavor;

chronic mangling of the English language;

extreme cognitive dissonance;

inability to incorporate new information;

pronounced xenophobia;

inability to accept responsibility for actions;

exceptional cowardice masked by acts of misplaced bravado;

uncontrolled facial smirking;

ignorance of geography and history;

tendencies toward creating evangelical theocracies;

and a strong propensity for categorical, all-or nothing behavior.

The disease is sweeping Washington. Naturalists and epidemiologists are amazed and baffled that this malignant disease can have spread so widely after originating relatively recently in a Texas Bush.

(Thanks Deb!)

Una ola de preguntas

Por Juan Gelman

El terremoto convertido en maremoto/tsunami que asoló 11 países del sudeste asiático y de Africa se inició a las 00.58 GMT del domingo 26 de diciembre que pasó. La Administración Nacional (estadounidense) en materia Oceánica y Atmosférica (NOAA por sus siglas en inglés) con sede en Hawaii emitió 16 segundos después un primer comunicado sobre el fenómeno natural en el que señalaba:

a) “según los antecedentes históricos en materia de terremotos y tsunamis, no existe una amenaza de tsunami destructivo”; b) “no entra en vigor ninguna alerta o vigilancia de tsunami” (www.prh.noaa.gov/ptwc/olderwmsg). La NOAA evaluó inicialmente que el sismo –la cuarta catástrofe de tal alcance desde el año 1900– era de 8 grados de la escala Richter, magnitud luego corregida al alza, a 8,5 y finalmente 9 grados. A dicho organismo pertenecen los científicos que trabajan en el Centro de Alerta de Tsunamis en el Pacífico (PTWC por sus siglas en inglés) instalado en Honolulu.

El distinguido economista Michel Chossudovsky –profesor de la Universidad de Ottawa con una larga trayectoria como consultor de distintos programas de las Naciones Unidas, autor de varios libros sobre su especialidad– formula preguntas inquietantes acerca del tema en un boletín del Centro de Investigaciones sobre la Globalización, con sede en Montreal (www.globalresearch.ca, 29-12-04). “Las fuerzas armadas y el Departamento de Estado de EE.UU. (que figuran en la lista de contactos del PTWC) recibieron una alerta temprana (del terremoto). La base naval norteamericana de la isla de Diego García en el océano Indico fue notificada. ¿Por qué los pescadores de la India, Sri Lanka y Tailandia no recibieron el mismo aviso que la Marina y el Departamento de Estado de EE.UU.? ¿Por qué el Departamento de Estado silenció la existencia de una catástrofe inminente? Contando con un moderno sistema de comunicaciones, ¿por qué no salió la información? ¿Por e-mail, teléfono, fax, satélites de TV?”. El profesor concluye: “Se podría haber salvado la vida de miles de personas”. El catedrático Tad Murty, de la Universidad de Manitoba, coincidió con su colega: “No hay razones para que una sola persona muera a consecuencia de un tsunami, en la mayoría de las zonas (devastadas) hubo lapsos de 25 minutos a 4 horas antes de que la ola golpeara” (The Calgary Sun, 28-12-04).

“¿Por qué no fueron informados los gobiernos de los países del océano Indico? –insiste Michel Chossudovsky–. ¿Hubo ‘directrices’ de las fuerzas armadas o del Departamento de Estado sobre la difusión de una alerta temprana?” Entre otros países de la región, Tailandia y Singapur integran el Grupo internacional de coordinación del Sistema de alerta de tsunamis, pero sólo Indonesia –donde el fenómeno ya hacía estragos– y Australia –muy lejos del epicentro– fueron avisadas de la amenaza. Esto ha preocupado a la senadora republicana Olympia Snowe, quien “investiga por qué la NOAA fue incapaz de proporcionar a las 11 naciones afectadas esa información valiosa que hubiera salvado vidas” (The Boston Globe, 2912-04).

Las preguntas del economista no se detienen ahí, avanzan sobre aspectos no menos inquietantes. “¿Por qué luego del desastre son las Fuerzas Armadas de EE.UU., y no las organizaciones civiles humanitarias y de ayuda que trabajan bajo la égida de las Naciones Unidas, las que asumen un papel dirigente (en la ayuda norteamericana a los damnificados)?” En efecto: el teniente general de marines Rusty Blackman, jefe de la 3ª fuerza expedicionaria naval que se está desplegando desde Okinawa y ex jefe de estado mayor de las tropas que tomaron Bagdad en 2003, fue designado responsable de todas las actividades de socorro de emergencia. Tres equipos bajo su mando ya se encuentran en Tailandia, Indonesia y Sri Lanka, se enviaron a la región dos portaaviones, decenas de aviones y helicópteros y varios miles de efectivos en un despliegue sin precedenteen la materia (www.defenselink.mil/news/Dec2004/n12292004_2004122905.html). Chossudovsky interroga: “¿Por qué se destina a un alto jefe militar que participó en la invasión a Irak a dirigir el programa estadounidense de ayuda de emergencia?”. Se podría agregar: ¿por qué nada menos que Colin Powell emprende una gira por la región, acompañado de Jeb Bush?

El todavía secretario de Estado norteamericano declaró en Yakarta que confiaba en que “como resultado de nuestros esfuerzos, como resultado de que los ciudadanos de Indonesia ven cómo nuestros pilotos de helicóptero los ayudan, se reforzará nuestro sistema de valores” (AP, 4-1-05). Confió en más: en que así “se secarán esos pozos de insatisfacción que podrían alimentar la actividad terrorista”. Menudos pozos de insatisfacción son para el mundo árabe y musulmán la ocupación de Afganistán en Irak, o la política de la Casa Blanca de apoyo irrestricto a Israel. Y luego: ¿ese despliegue militar estadounidense sólo procura proporcionar ayuda humanitaria, volver simpático el rostro militar de EE.UU.? ¿Las consecuencias del tsunami “ofrecen acaso una oportunidad para fortalecer la presencia del Pentágono en el sudeste asiático” (dc.ind ymedia.org, 29-12-04)? ¿Por esa razón la ayuda que la Casa Blanca ofreció a las víctimas del tsunami pasó súbitamente de 18 millones de dólares a 35 millones luego y a 350 millones por ahora? La base aérea tailandesa de Utapao, ubicada a unos 150 kilómetros al sur de Bangkok, se convertirá en un centro de comando de la mencionada fuerza expedicionaria naval de EE.UU. ¿Servirá además para avanzar en la realización del sueño imperial de los “halcones gallina”? En Utapao estacionaban los B-52 que bombardearon Vietnam del Norte. Pareciera que al teniente general Rusty Blackman no lo arredran los fantasmas.